El aire huele a ti.

Detenerme, mirar alrededor y darme cuenta que el aire esta perfumado con tu perfume, buscarte en cada giro de mi cabeza, a la izquierda, a la derecha y ver como NO te encuentro en ningún sitio, que solo debo conformarme con tu olor, WAO* que difícil es, como le explico al aire que tu perfume no es tan solo un aroma? como le explico que es algo mas?, algo tan difícil y fácil de explicar, algo que perdió la lógica, la razón, algo que unos simples mortales no pueden entender, pues solo el que ha amado entiende lo que es un aire perfumado sin la presencia de ese ser protagonista de una revolución en la que el vencedor tan solo se marcho pues el tiempo en la vida de ella expiró.

Oh aire, tan rico, tan puro, tan oloroso, debo confesarte que le traes sonrisas a mi alma, la llenas de ricos recuerdos en los cuales ella bailo al ritmo del amor, brinco, sonrió, se divirtió como nunca, se deleito, obtuvo el poder de detener el tiempo, pero lo mas importante: era correspondida por otra alma que sonrio al conocerla y junto a ella experimento todo lo que un alma enamorada puede vivir.

A través de esta fragancia envuelta en brisa mi cuerpo experimenta un encuentro de emociones, SI! estoy hablando de emociones positivas, emociones que revuelcan un torbellino de sensaciones bañadas en felicidad, que rico es ser feliz y recordar sin dolor, que maravilloso es ser víctima de la sanidad del tiempo.

Y entre la mezcla de el aire con su perfume envuelto ya con el mío, entre la liga de olores, con las pupilas brillando de alegría y con una sonrisa de oreja a oreja, despido su recuerdo, agradeciendo la revolución que causo en mi cuerpo y la lluvia de buenos momentos que trajo a mi mente.